miércoles, 26 de junio de 2013

Modas, tabúes y comodines en las Administraciones Públicas

Aquí tenemos un amplio repertorio de conceptos, palabras, frases, ideas, modas que llegan a las Administraciones Públicas (y a los gabinetes técnicos de los partidos políticos) y con la misma se van. Llegan ufanos, brillantes, seguros de sí mismos sin conocer quién les recibirá, políticos de bajo perfil, funcionarios de partido agarrados a su silla "privada", en la sombra del poder, pero definitivamente en la sombra. La lucha desde el comienzo es sorda, silenciosa a más no poder, barriobajera, poniendo palitos en la rueda, arena en los engranajes, cortando el suministro de combustible...De tamaño esfuerzo contra reformador no puede salir nada bueno, y finalmente todas estas ideas, conceptos, renovaciones que triunfan por otros lares, fracasan estrepitosamente (pobriños, ellos creen que han fracasado, pero realmente les han hecho fracasar), y pasan a formar parte de los archivos de funcionarios ilusionados que vieron una vez más frustrados sus intentos de renovar la Administración Pública española, sea del nivel que sea, nacional, autonómico o local. Y eso en el mejor de los casos, porque también pueden acabar esos informes en el cubo de la basura, algunos porque se lo merezcan, copiada inadaptada de otros mejor diseñados para otros clientes, y otros porque los que los tiran no sean capaces de valorar el trabajo bien hecho, encantados con librarse de esa amenaza para ellos y ellas, adaptando a los tiempos que corren la quema de libros.

Y comenzaré por un concepto que va y viene desde hace ya algunos años, desde la NGP, o Nueva Gestión Pública, en los tiempos del vicepresidente norteamericano Al Gore, ¿se acuerdan?, con Clinton en su primer mandato 1993-1997. Qué tiempos aquellos..
Esta palabreja nos trae a mal traer en cualquier administración de la península ibérica. Unos pocos la defendemos a capa y espada, pero en general, lo descarnado de la misma, asusta y pone tan en su sitio al político y al funcionario en general, que se unen en conchabeo diabólico para denostarla y a intentar acabar con ella, utilizando los tradicionales "contribuyente", "administrado" y "doy cuenta a Usted",,...todo lo que haga falta para intentar dejar en su sitio, es decir, bien lejos y bien abajo al ciudadano que debería ordenar y mandar. Todas las empresas de consultoría deberían aprender la lección y esforzarse un poco en remendar sus manuales, so pena de ser arrinconadas, marginadas, estigmatizadas, y por tanto, no volver a ver un euro público en forma de contratos públicos.

Pero es que en la otra acepción de la palabra cliente, el de receptor de servicios, las propias Administraciones lo son de todo aquello que compran. Y de nuevo se arrincona, se ignora la idea de que tenemos que saber comprar, recepcionar, pagar, evaluar y controlar lo que compramos, porque somos clientes. De tan poco que nos gusta que los ciudadanos se presenten ante nosotros como clientes de los servicios que ofrecemos, eliminamos de nuestras mentes la otra acepción del concepto convirtiéndola en el primer tabú del buen político y del obsoleto funcionario/a.

He mencionado a las consultoras...sí, aquí fundamentalmente hemos pasado por diversas modas: la calidad, la estrategia, el liderazgo...Todas se han ido por agujero del retrete en más o menos tiempo, salvo que algún funcionario converso conocedor y experto de esas materias, se haya juramentado para mantenerse en sus trece y continuar con la gran obra modernizadora. De nuevo, pobriño, no le arriendo las ganancias en forma de malos ratos y por tanto, mala salud. Lo experimento en mis propias carnes a diario.

Citaremos más modas, entre las que no pueden faltar en estos tiempos que vivimos, la crisis económica, los recortes, las reformas estructurales, las externalizaciones (con su correspondiente tabú: las privatizaciones), los rescates (y su tabú,las nacionalizaciones), las regulaciones, los convenios para esto y para aquello.

Ya metidos en el área de los comodines, recolectamos del campo administrativo, como bellas flores que crecen como amapolas en un campo de cereales las de la pertinencia, a los efectos oportunos, cuando proceda.

Ah no debemos olvidar otras modas recién llegadas pero bien instaladas en las AAPP: la fotocopia, de lo que sea, como sea, sin preocuparse de nada más, porque claro, comienzas exigiendo una compulsa, pero luego tienes que "adverarlo", y cuando descubres por tí mismo (ningún curso, qué curioso) que las fotocopias en color, con un papel de grosor adecuado, de calidad es capaz de simular a la perfección cualquier documento  oficial, te relajas, y te relajas y al final te olvidas de cualquier mínima comprobación. Y hablando de chapuceo generalizado tenemos el corta-pega, el peor de todos, pero que ha sido incapaz de erradicar el Muy señor nuestro, y el doy cuenta a Usted...de muchas de las notificaciones que la Administración periférica viene realizando a diario, como si los lustros, las décadas y los siglos nunca hubieran pasado.






lunes, 24 de junio de 2013

Energía: política energética en España.

Defensa de la competencia inoperativa. Tomadura de pelo. Los precios de la electricidad, carburantes, etc. en serie histórica. Más impuestos...

¿Seguro que hay luz al final del túnel?

Y lo pregunto retóricamente porque no tengo nada claro que lo que el señor Rajoy, el gobierno del PP, y toda la corte celestial de tertulianos y prensa mediática adicta corean al unísono sea cierta. Es bien cierto que España es la cuna de Cervantes, el sabio que alumbró El Quijote, y que nos retrató genialmente en aquella frase de "sostenella y no enmedalla", que a fuerza de repetir y negar algo, el propio mentiroso termina por creerse su propia mentira, y ni el mejor detector de mentiras es capaz de pillarle en renuncio. Y como además tienen por cierto y seguro de que cuantos más digan algo, lo que sea, más por verdadero se dará entre el público oyente e ignorante, el coro ha elevado su tono hasta saturar nuestros oídos, incluso levantándonos un fuerte dolor de cabeza, y para que algunos críticos entre los que me encuentro digamos basta.

Entre las frases más utilizadas del argumentario del partido en el poder, y sobre todo por boca de nuestro Presidente del Gobierno, tenemos la de que hay luz al final del túnel. Ante tanta insistencia he asomado mi cabeza por una ventanilla del tren de la historia de España en el que vamos todos montados sin darnos cuenta y no veo esa luz por ninguna parte. Bueno sí, he visto que vamos directos hacia una pared donde termina el túnel, y la dichosa luz no es otra que la lámpara de emergencia que señale el final de vía, advirtiéndonos que teníamos que haber tomado el desvío anterior hacia la salida. No es que sea demasiado tarde pero estamos a punto de estampillarnos "nacionalmente" al estilo griego o  al estilo portugués porque el conductor de la locomotora se ha empeñado en leer las señales que constantemente le viene marcando el servicio ferroviario de la Troika, que no es otro que incrementar la velocidad del convoy dentro del túnel sin contemplar ningún desvío de los que saben algo más de "tunelería" económica.

El problema que tenemos los que hemos visto la lamparita de emergencia y el cartel de final de vía es que vamos muy rápidos y no podemos bajarnos sin rompernos la crisma. Además estamos bastante mareados por los tirones que da el maquinista y así no conseguimos consensuar un plan de actuación que en la mente de algunos pasa por asaltar el puesto del maquinista y echar el freno inmediatamente y en la de otros consiste en mantener la fe en que lo que se ve al final no es más que un muro de cartón piedra que romperemos fácilmente, saliendo a la claridad, renovados en un mundo maravilloso, de nuevo...

Y ahora, intentaré aterrizar en este mundo real, dejándome de ensoñaciones y de parábolas, que no todo el mundo entiende y en cualquier caso son objeto de interpretación e incluso debate acerca de lo que ha querido decir con ella quien las ha utilizado. Pues bien, después de un comienzo de mes de junio superoptimisma nos encontramos con unos últimos días de espanto en el mundo financiero, con amenaza de la FED de cerrar el grifo, y con Japón realmente muy tocado, además de la enorme "sorpresa" del malestar  popular mostrado por las economías emergentes de Brasil y de Turquía. Se nos está revolviendo el planeta y llueve sobre mojado. Así que no hay inversor que pueda estar tranquilo más de una semana seguida.

Desde luego que si observamos los últimos datos del INE sobre los pedidos industriales, en la última nota de prensa emitida el 19 de junio, la situación no puede ser peor, incluso agravándose en el primer trimestre de 2013. He creído ver en una ligera mejoría del índice citado, del mes de abril, último del que se conocen los datos, la fuente de este inmenso optimismo que nos invade. Pero yo concluyo de manera diferente:

Elaboración propia a partir de los datos del INE (nota de prensa del 19 de junio de 2013)
Se trata del segundo trimestre con fuerte valor negativo, y peor aún es ver que ninguna comunidad autónoma se libra del encogimiento económico si tenemos en cuenta este índice que adelanta en cierta medida lo que nos espera en los próximos meses. Ni siquiera el análisis por mercados nos ayuda mucho ya que no es la zona euro la que está tirando de lo poco se mueve en España, sino el resto del mundo. Europa se está parando y nadie parece querer creérselo.

Índice general nacional por mercados (fuente INE)
Índice Tasa     abril(%) Tasa anual(%) Media en lo que va de año
Indice general 104,5 5,4 5,2       -4,6
1. Mercado interior   92,2 4,9 0,7       -7,2
2. MERCADO EXTERIOR 123,6 6,6 14,7      1,3
2.1. Mercado exterior, zona euro 115,0 6,5 11,1      0,4
2.2. Mercado exterior, zona no euro 137,5 7,3 19,8      1,9

La media de lo que va de año se encuentra en un -4,6%, porque el mercado exterior de la zona no euro ha llegado al 1,9%, pero sin compensar el hundimiento del mercado interior (-7,2%). Con esta información, no dejo de asombrarme del optimismo  de muchas personas que como razonamiento básico tienen el lema "de todas las crisis se sale". Quizá ese sea el problema, las ganas que tenemos todos de creernos las mentiras gubernamentales o tal vez, sea la solución a nuestra angustia vital ante el próximo impacto de la locomotora Rajoy...

Por ahora, como propósito general que me hago, y que me gustaría extender a quien lea este post, me dedicaré a leer y criticar concienzúdamente la propuesta de reforma administrativa de España, de nada menos que 243 páginas que me he descargado. De ese tema algo más conozco y podré hacerme un esquema de lo que creo que puede ser válido y de lo que seguramente serán solo auténticos brindis al sol, conocida la maquinaria burocrática de los principales partidos de este país y de sus intereses propios inconfesables. Pero eso será ya tema de otra entrada en este blog.